Las localidades de Bolívar, Henderson y Daireaux atraviesan por estas horas los momentos más críticos desde que comenzó la problemática de las inundaciones en marzo pasado. En esos territorios ya llovió mucho más del promedio anual, mientras que además preocupa el agua que llega desde la zona de Adolfo Alsina y Guaminí, distritos que también están seriamente afectados por el exceso hídrico.
El coordinador de la Comisión de Emergencia de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Pablo Ginestet, dijo a DIB que las inundaciones llegaron a su “pico máximo” en esos partidos, y que la situación fue empeorando sin respiro desde marzo. “Hoy estamos en el peor momento, la red vial está totalmente colapsada”, señaló el productor, quien también es presidente de la Asociación Rural de Henderson, donde “el territorio está afectado en un 50%, sobre todo en la zona que limita con Daireaux”.
Por su parte, el intendente de Bolívar, Eduardo Bucca, confirmó hoy que son 400 mil las hectáreas afectadas por las inundaciones en su partido, y detalló que en este momento hay «un 80% del territorio anegado: un 40 o 50% bajo el agua y el resto que por cortes de caminos viales o el incremento de humedad o zonas barrosas, no se pueden utilizar».
Al respecto, explicó que en lo que va del año cayeron 1.400 milímetros para una media anual de 800 y que «ese incremento de precipitaciones también se produjo en otras localidades, aguas arriba». «Están todos los canales y arroyos saturados y eso genera un desborde y la inundación que hoy tenemos», agregó Bucca.
Por último, señaló que si bien «no hay evacuados, hay productores que viven en sus campos y no pueden salir por el corte de caminos viales» y volvió a resaltar que «la pérdida de producción es impresionante».
En tanto, el agua desbordaba las contenciones en la Rotonda de Bolívar y ya se encontraba sobre la las rutas 65 y la 226, donde se debe circular con mucha precaución.
Desde la Sociedad Rural de Daireaux señalaron a DIB que en ese partido ya llovieron unos 900 milímetros cuando el promedio anual es entre 850 y 870 (mm). “Las lluvias no nos dieron tregua, pero también nos preocupa el agua que viene desde Guaminí y de la laguna Alsina, todo ese sistema también está colapsado”, dijo a esta agencia Santiago Negri, de la Sociedad Rural local.
“La situación se complica semana a semana. Hoy tenemos campos con los accesos totalmente cortados, la localidad de Andant está prácticamente incomunicada y las escuelas tuvieron contados días de clases”, agregó Negri. Y si bien dijo que es muy difícil precisar el porcentaje del territorio afectado, señaló que la zona agrícola del partido “sólo se podrá sembrar con suerte el 30%”, mientras ya preocupa “la mortandad de animales en la región ganadera del distrito”.
Asimismo, el panorama también es desolador en General Alvear, donde el territorio rural “está inundado en un 60%”, según dijo el intendente local, Alejandro Celillo, quien señaló que la demora en los trabajos se debe a la presencia permanente del agua.
Crece el conflicto por el tapón
Como viene informando esta agencia, a esta situación se le suma la polémica por la construcción de un tapón derivador para descomprimir el agua de Guaminí y Alsina, que enfrenta a los distritos que conforman el Comité de Cuenca de las Lagunas Encadenadas del Oeste por las posibles consecuencias que esa obra podría generar en Coronel Suárez y La Madrid, y en los territorios próximos a la cuenca del arroyo Vallimanca, entre los que se encuentran Bolívar, Henderson y Daireaux, entre otros.
La polémica gira en torno a la construcción de un tapón en el denominado Partidor de Piñeyro en el arroyo Sauce Corto con la finalidad de drenar el exceso hídrico por el arroyo Huascar -un rebalse del arroyo Sauce Corto-, y descomprimir el ingreso de agua a la Laguna Alsina.
La obra fue decidida días atrás en una reunión del Comité de Cuenca con el subsecretario de Infraestructura Hidráulica, Rodrigo Silvosa, pero generó malestar entre productores de Coronel Suárez y La Madrid, que obligaron a suspender los trabajos ante el temor de que el tapón derive las aguas a sus campos y genere más complicaciones.
En las últimas horas se sumó a la polémica la Sociedad Rural de 25 de Mayo, que manifestó su preocupación por las consecuencias que esta obra podría acarrear en el distrito, mediante una nota enviada al ministro de Infraestructura bonaerense, Roberto Gigante.
El presidente de la Rural de 25 de Mayo, Alberto Larrañaga, indicó que “el Comité de Cuenca de las lagunas Encandenadas se maneja con autonomía, pero esto es inaceptable cuando hay consecuencias sobre otros partidos”. En diálogo con el diario local La Mañana, explicó que “el Sauce Corto baja de la Sierra de la Ventana y desemboca en la laguna Alsina, que es de la cuenca de las Encadenadas, mientras el Huáscar pertenece a la cuenca del Vallimanca”, que ya se encuentra desbordada.
Por su parte, desde la Sociedad Rural de Daireaux –distrito que también integra la Cuenca de las Encadenadas- opinaron que “existe un Comité de Cuenca que en momentos de crisis debe decidir el mal menor” y consideraron que por eso, “es importante que todos los intendentes participen de las reuniones. Lamentablemente el intendente de Daireaux (Alejandro Acerbo) no estuvo presente”, consideraron.