El fin de semana a causa de las altas temperaturas, la bajante del Río Paraná y el agua cálida, Santa Fe se vio invadida por palometas que terminó con aproximadamente 30 personas terminaron lastimadas y una adolescente de 13 años perdió un dedo del pie.
El hecho se produjo en la Costanera Este y las autoridades le piden a la población no bañarse en las playas que fueron habilitadas sólo como solárium. “La mordedura no tiene la misma incidencia en menores que en personas adultas. Hubo una menor a la que le amputó un dedo del pie”, explicó en Aire de Santa Fe Sergio Berardi, representante de la Seccional Santa Fe del Sindicato Único de Guardavidas.
La chica de 13 años que fue asistida y a quien se le realizó un injerto en el quinto metatarsiano.
Además, Belardi agregó que “el hábitat natural de la palometa es la laguna y la falta de caudal y la alteración por las altas temperaturas hace que el cardumen se vuelque a la costa. Por eso se dan casos tan seguidos”.