En Chacabuco, una menor de 12 años simuló estar dormida cuando entraron a robar a su casa

El ilícito se registró el jueves de la semana pasada, cerca de las 8:30.

Esa mañana, Diego Vespaciano y uno de sus hijos,  habían salido de viaje hacia la provincia de San Luis cerca de las 6 hs.  La esposa del hombre y madre de los chicos los había  acercado a la Terminal de Ómnibus. Poco después regresó, se cambió y volvió a salir  mientras su hija, debía prepararse ya que la pasaría a buscar a las 8:30.

Cuando la mujer llama a la menor para ver si estaba lista y es cuando le dice que había dos personas dentro de la vivienda que estaban robando.

Se cree que los sujetos accedieron  al dormitorio en el que la pequeña se hacía la dormida y si bien se le habrían acercado en algún momento, no la tocaron.

Minutos después iba a llegar la mujer con efectivos policiales pero ya los sujetos habían desaparecido llevándose pertenencias de la familia.

Ya iniciados los primeros minutos y puesta en marcha la investigación, los uniformados le exhiben a la menor algunas fotografías y ella identificó a uno.

Como si la situación que les tocó vivir no fuera suficiente, treinta minutos después y cuando dentro de la casa había personal de Policía Científica realizando un levantamiento de rastros y otros uniformados,  volvió uno de los delincuentes y comenzó a amenazar a la familia con que iba a incendiarl la casa.

Indefectible la pregunta que al medio de comunicación Chacabuco en Red se hizo el  Dr. Diego Vespaciano. “Eso fue insólito. No sé cómo le llega esta información a la persona. Me llamó la atención que ahí, la policía no lo haya aprehendido”.

Con el correr de los días, también hay un reclamo del profesional para con la “falta de compromiso de la fiscalía y la justicia. No se activaron los protocolos para una menor de 12 años. Fue algo horrible. De hecho, mi hija se desmayó en la comisaría”, sostuvo el profesional. Tres días después no se había realizado ningún allanamiento.

“Parece que hay algunos delincuentes en Chacabuco, que tienen un manto de cuidado. Soy abogado y sé cómo se actúa en estos casos. Si yo fuese delincuente y este es el accionar de la fiscalía, saldría a robar todos los días”, sentenció.

Y en lo que les está tocando vivir ahora, hay sufrimiento. “Encontrarnos con que los delincuentes orinan y defecan por toda la casa. Es algo indescriptible. Hoy tenemos una sensación nueva. A uno le puede faltar dinero, se las arregla, pero cuando no tenés seguridad no tenés nada. Tenés miedo de ir de una pieza a otra dentro de tu propia casa”, concluyó