La semana pasada, la farmacéutica admitió por primera vez que su vacuna podía causar efectos secundarios poco comunes como la trombosis
AstraZeneca ha decidido retirar su vacuna contra el COVID-19 a nivel mundial, según informó The Telegraph el martes
La retirada de la vacuna de AstraZeneca ha sido un movimiento importante en el ámbito de la salud a nivel mundial. Esta medida se ha aplicado primero en la Unión Europea, donde la empresa decidió retirar voluntariamente su autorización de comercialización. Se espera que otros países, incluido el Reino Unido, sigan el mismo camino en los próximos meses.
Esta decisión no se ha tomado a la ligera. AstraZeneca ha enfrentado múltiples demandas colectivas debido a efectos secundarios graves asociados con su vacuna, incluidos casos de trombosis. La compañía ha admitido que su vacuna puede causar un síndrome poco común llamado trombosis con trombocitopenia (TTS), lo que ha generado preocupación y controversia en torno a su seguridad.
La reducción en la demanda de la vacuna y la disponibilidad de otras opciones actualizadas para combatir las variantes del COVID-19 han sido factores importantes en la decisión de retirarla del mercado. Este movimiento ha marcado un hito en la historia de la lucha contra la pandemia, y plantea importantes preguntas sobre la seguridad y eficacia de las vacunas en general.