Es conocido que el ejercicio físico es clave para un correcto desarrollo de nuestra salud y bienestar. En este marco, recientes estudios científicos subrayan la importancia de la actividad física para combatir la diabetes.
Sin embargo, dicha rutina y sobre todo el componente “individual” que conllevan determinadas actividades como el running o las caminatas puede convertirlo con el tiempo en algo no muy atractivo.
A raíz de esto, desde el Consultorio Integral Diabetológico Dr. Buso sugieren una idea cuyo componente social permite acoplarse al de bienestar. “En el afán de conseguir el mejor resultado en el poco tiempo libre de que disponen nuestro pacientes, varias actividades han ganado terreno, como por ejemplo las clases del baile, donde se puede verificar el cumplimiento de toda la definición de salud: estado de bienestar, Bio (porque es ejercicio físico), Psico (porque sirve para despejar la mente), y social (porque la danza implica el intercambio con una o varias parejas en el mismo ámbito)”.
Según lo publicado recientemente en la revista de Diabetología de la European Association for the Study of Diabetes (EASD), es relevante recordar «la importancia de realizar actividad física» de forma regular «para prevenir la diabetes tipo 2 entre la población en general y ejercer un mejor control de la diabetes tipo 1 y 2 entre quienes la padecen».
La diabetes es la enfermedad por la cual los niveles de glucosa en la sangre están por encima de los niveles normales. La EASD sostiene que «los hábitos de alimentación poco saludables y el aumento del sedentarismo de la población están provocando un importante incremento de personas con diabetes tipo 2”.
Por su parte, para el doctor Carlos Javier Buso, “es tan importante el ejercicio físico que incluso constituye la estrategia de prevención de la diabetes tipo 2 más efectiva con que contamos, muy por encima de algunos tratamientos farmacológicos y el plan alimentario inclusive”. No obstante, advierte sobre su aplicación según «el peso de la persona, el momento biológico y particularmente si sufre de alguna complicación adicional”.
Y detalla: «El ejercicio regular en general y en especial en las personas con diabetes reduce la mortalidad cardiovascular, tiene impacto en los lípidos y la insulinoresistencia, mejorando la oscilación glucémica. Para las personas con Diabetes tipo 1, es fundamental una buena señal insulínica, puesto que la realización de ejercicio con valores altos de glucosa ( 250 mg%) está contraindicada por el riesgo de utilización de combustibles alternativos. En sujetos con Diabetes Tipo 2 cualquier tipo de ejercicio es bienvenido, siempre y cuando se respeten las pautas de hidratación e ingestas para soportar el consumo adicional de glucosa por el trabajo muscular”.
En este contexto, la American Diabetes Association lanzó una campaña viral llamada la “Diabetes Dance Dare” (“Atreverse al baile contra la diabetes”). Sólo en Estados Unidos, cada 23 segundos un ciudadano de ese país es diagnosticado con diabetes por lo que la campaña funciona no sólo como un concientizador, sino también para impulsar el ejercicio físico mediante las redes sociales entre los pacientes de la enfermedad.
Personalidades del deporte y el espectáculo ya se sumaron al desafío. Entre ellos, el cantante Usher o el multipremiado exjugador de basquet de la NBA Shaquille O’Neal ya participaron con videos en las redes sociales.
