El azaroso descubrimiento le ocurrió al cirujano cardiovascular John Martin cuando a principios de año empezó a probar un dispositivo de ultrasonido de bolsillo desarrollado por Butterfly Network, una empresa startup de Connecticut (Estados Unidos) a la que acababa de incorporarse como director médico.
Martin llevaba tiempo notando una incómoda sensación en la garganta. Así que sacó un poco de gel y pasó la sonda, del tamaño y la forma de una máquina de afeitar eléctrica, a lo largo de su cuello, según consignó MIT Technology Review.
En su smartphone, conectado con el dispositivo Butterfly IQ, aparecieron unas imágenes en negro y gris. Martin no es especialista en cáncer, pero sabía que la masa oscura de tres centímetros que vio no pertenecía a esa parte de su cuerpo. El doctor recuerda: «Estaba lo suficientemente capacitado como médico para saber que tenía problemas». Se trataba de un “carcinoma espinocelular”.
El gadget médico es la primera máquina de ultrasonido para smartphone que llega al mercado en ese país. El ultrasonido dispara sonido contra el cuerpo y capturar los ecos. Por lo general, las ondas sonoras son generadas por un cristal vibrante. Pero la máquina de Butterfly usa 9.000 diminutos sensores grabados en un chip semiconductor.
Los responsables afirman que su máquina saldrá a la venta este año por unos 1.700 euros, un precio mucho menor que cualquier otro modelo en el mercado.
El director de ultrasonidos del departamento de emergencias de Denver Health (EE. UU.), John Kendall, es uno de los asesores de la compañía y ha estado usando el dispositivo. Dice que las imágenes resultantes no son tan detalladas como las producidas por las máquinas de ultrasonido de alta gama que van en los carros. Pero afirma que la verdadera pregunta es si pueden ofrecer «una respuesta de diagnóstico mejor«. Teniendo en cuenta el bajo coste del dispositivo y la forma en que puede colocarlo en el bolsillo superior de su bata, «ni siquiera es una comparación justa», advierte. Y concluye: «Es infinitamente portátil. Ni siquiera es el mismo género de máquina».
La interpretación automatizada de imágenes de ultrasonidos podría convertir la tecnología en algo muy fácil de usar para los equipos de ambulancias, en regiones remotas o incluso en casa. Kendall afirma: «Creo que se acerca la capacidad de adquirir una imagen y saber lo que está viendo».