Los seres humanos necesitan alrededor de 60 nutrientes diferentes para poder mantener una dieta saludable. Entre proteínas, hidratos, grasas, vitaminas, minerales y fitonutrientes, la inclusión de 20 ó 30 productos en la mesa a la semana resulta fundamental para concebir el éxito de una dieta.
«Entre los errores más comunes que veo en la mesa de los argentinos es el estilo de compra. Que viene influenciado por la guerra y por suerte Argentina tiene comida para muchísimos millones más de los que somos. Nos sobra comida y nos sobran calorías por habitantes», expresó a Infobae Mónica Katz, médica especialista en nutrición.
«No podemos llegar el carrito en el supermercado, no podemos tener llena la heladera. En Argentina, según los últimos relevamientos que hemos realizado, desechamos la cuarta parte de lo que compramos. Lo tira el mayorista, el supermercado, lo tirás en tu casa aunque hayas cocinado de más para comer otro día. Derrochamos alimentos y eso no puede seguir sucediendo», agregó Katz.
Desde el Centro de Estudios sobre Nutrición Infantil (CESNI), resaltaron los cambios en el estilo de vida y las variaciones de precios, así como impacto de la publicidad, cambió los hábitos de consumo en Argentina. «Seguramente es el estilo de vida, hace 20 años el mundo era distinto. Probablemente la publicidad de los alimentos ha tenido algo que ver. Antes se destinaba más tiempo a preparar los alimentos, hacer las comprar y cocinar. Todo eso se traduce a la dieta», comentó Esteban Carmuega, director de la institución.
«Los argentinos compran de más. El mejor ejemplo es el asado: ponemos mucha carne y muchas achuras. No está mal comer carne, pero sí poner lo justo y mañana se cocinará de nuevo. Si tenés, comés de más».
«Otro gran error -documentado por el Ministerio de Salud de la Nación- es que estamos comiendo cada vez menos frutas y verduras. No hay institución del mundo, entidad o congreso que no haya demostrado con evidencia científica que comer fruta y verdura es saludable, ayudando a prevenir distintas enfermedades (alzheimer, diabetes, obesidad, hipertensión, entre otras). Por lo menos hay que comer cinco porciones por día. Los argentinos comemos menos de dos».