La inusual persistencia de los mosquitos, incluso durante la ola de frío, ha dejado perpleja a la población. ¿Se trata del transmisor del dengue? ¿Por qué parecen más resistentes de lo habitual? Especialistas en el tema ofrecen algunas respuestas esclarecedoras
¿Por qué persisten los mosquitos a pesar del frío? Explicación de especialistas
Contrario a lo esperado, la llegada del frío no ha sido sinónimo de desaparición de los mosquitos. A pesar de las bajas temperaturas registradas en el centro del país, estos insectos continúan asediando plazas, parques e incluso el interior de viviendas y comercios.
La doctora Victoria Micieli, investigadora principal del Conicet, aclara que estos mosquitos no son el Aedes aegypti, transmisor del dengue, sino el Aedes albifasciatus, también conocido como «mosquito de inundación» o «mosquito plaga». Este fenómeno está vinculado a condiciones climáticas particulares, como períodos de sequía seguidos por lluvias abundantes.
Manuel Espinosa, biólogo de la Fundación Mundo Sano, explica que los mosquitos tienen diferentes rangos de temperatura en los que pueden desarrollarse. El Aedes albifasciatus, por ejemplo, puede habitar en áreas más frías, incluso llegando hasta Tierra del Fuego.
Sylvia Fischer, directora del Grupo de Estudio de Mosquitos (GEM), añade que la lluvia reciente ha propiciado la creación de nuevos criaderos de mosquitos. Aunque estos insectos tienen mayor tolerancia al frío que otros, las bajas temperaturas han reducido su actividad de picadura en los últimos días.
Sin embargo, Fischer advierte que, a pesar del frío, los mosquitos pueden resistir y permanecer activos por un tiempo más. A medida que las temperaturas mínimas continúen por debajo de ciertos límites, su ciclo de vida se verá interrumpido gradualmente.
En resumen, aunque la presencia de mosquitos persista, especialmente del Aedes albifasciatus, se espera que su actividad disminuya gradualmente conforme las temperaturas continúen bajando en los próximos días.