Eduarda decidió cambiar de género con el objetivo de poder ver a su hija, después de meses de reclamos fallidos ante la Justicia, mientras aseguraba que el vínculo con la pequeña fue interrumpido por una falsa denuncia por parte de su ex pareja.
Según explicó a medios locales de Neuquén, hay pericias que demuestran su inocencia con respecto a la denuncia que interpuso la madre de su hija, quien asegura que “él” abusó sexualmente de la niña, y que sería positivo revisar los procedimientos ante denuncias falsas.
“Aunque parezca mentira, ahora que tengo el documento en mano, mi primera sensación es un poco más de tranquilidad. Porque ya nadie me puede atacar, me puedo defender, no puedo recibir más agresiones”, indicó Eduarda, que desde el 4 de enero tiene su nuevo DNI.
“Es una locura. Para mí esto era un sueño… Pero, porque significa estar un poquito más cerca de mi hija. Ya estoy pensando diferente con el documento en mano. Estoy pensando como mujer y viendo qué opciones tengo ahora”, concluyó.