Cerca de 300 lobos marinos que desde hace años suelen instalarse sobre el muelle de la banquina del puerto de Mar del Plata y en veredas cercanas o en un estacionamiento ubicado a unos 50 metros del mar, serán reubicados por un grupo de especialistas para evitar que afecten las actividades en las áreas operativas de embarcaciones pesqueras y que se desplacen en las zonas más transitadas por turistas.
A partir de una iniciativa del Consorcio Portuario Regional marplatense, miembros de la Fundación Fauna Argentina y de la Universidad Nacional de Mar del Plata (Unmdp) trabajarán para alejar a los ejemplares que habitualmente se ubican en esos espacios, y sostendrán guardias de 24 horas durante al menos un mes para evitar que vuelvan a ocupar el lugar.
Los especialistas intervendrán, a su vez, para realizar el seguimiento de los animales, censarlos y estudiar sus desplazamientos, con el objetivo de que la colonia de lobos se concentre en el otro extremo del puerto, sobre la escollera Sur.
«Lo que vamos a hacer inicialmente es arriar a los lobos hacia el muelle de la banquina, y una vez ahí hacer que vuelvan al agua. Después trataremos de de evitar que vuelvan a subirse, y creemos que si lo hacemos de manera sostenida, van a preferir instalarse en otro espacio», explicó Juan Lorenzani, presidente de la Fundación Fauna Argentina.
La intervención diagramada buscará determinar, a su vez, qué proporción de los cerca de 900 lobos que integran la colonia marplatense eligen habitualmente ese espacio que se busca despejar.