L-Gante, el cantante de cumbia 420 que pasó casi 100 días preso por privación ilegal de la libertad y amenazas, fue acusado de atacar la casa del denunciante Darío Gastón Torre luego de quedar libre el pasado 8 de septiembre.
Elián Ángel Valenzuela, más conocido como L-Gante, quien podría volver a estar detención por privación ilegal de la libertad y amenazas, sufrió una nueva denuncia, acusado de realizar un presunto ataque a la casa de uno de sus denunciantes.
Los abogados Leonardo Sigal y Pablo Becerra, quienes representan a Darío Gastón Torres —una de las presuntas víctimas del artista— habían solicitado que se revise el beneficio de la libertad del artista en la Cámara de Apelaciones y Garantías de Mercedes.
El propio Sigal fue quien denunció en un vivo de Instagram de Radio Mitre que «después de la liberación de Elián Valenzuela a mi cliente le rompieron un vidrio de su casa», que «acá no hay invento de nada» y por esa razón mencionó que «la víctima lo que quiere es tranquilidad».
Para contextualizar, el juez de Garantías 2 de Moreno-General Rodríguez, Gabriel Castro, fue quien el 8 de septiembre pasado dictó el cese de la medida de coerción que pesaba sobre el cantante, por lo que quedó libre por el «beneficio de la duda» tras la declaración de cuatro nuevos testigos presenciales del hecho, pero aún sigue imputado por amenazas y privación ilegal de la libertad.
La denuncia fue realizada el 27 de mayo por Torres, al acusar a Valenzuela de ser apuntado con un arma y subirlo a la fuerza al BMW blanco conducido por el propio artista, luego de incidentes con varios jóvenes integrantes de la denominada «La Mafilia» —el grupo de amigos y músicos al que pertenece L-Gante— a la salida del local bailable «Río».
En ese marco, Sigal consideró que le «pareció un error del Juez de garantía no darle una seguridad a mi cliente, no se lo está cuidando y ahora quieren lavarle la imagen a L-Gante con estas entrevistas».
¿L-Gante vuelve a la cárcel?
Vale recordar que el fiscal que lleva adelante la causa, Raúl Villalba, también presentó su apelación en un escrito respecto al cese de la medida de coerción, el pasado 8 de septiembre.
Para Villalba, la liberación causaba «un gravamen no susceptible de reparación en otra etapa del proceso, puesto que el encartado continúe privado de la libertad parece indispensable para asegurar el desarrollo del procedimiento». Además, agregó que en la resolución «no se ha advertido ni mencionado la desaparición de elemento alguno que haga mudar la situación procesal en la que el encartado se encontraba».
Es por eso que este jueves, los magistrados Carlos Risuleo y Oscar Reggi, de la sala I de la Cámara de Apelación y Garantías de Mercedes revocaron la decisión del juez de Garantías.
Los magistrados consideraron que «no varió la apariencia de responsabilidad del encausado, como así tampoco el peligro cierto de frustración de los fines del proceso» si no se adopta la medida de coerción, y que no se ha incorporado «elemento alguno que amerite la reconsideración del medio coercitivo» decretado en su oportunidad.
En ese contexto, el abogado Sigal puso en duda la cuestión ligada al artista al señalar que «a esta hora peligra la libertad de L-Gante». «Se revocó su liberación y el fiscal pidió su detención, ya le habían revocado varias cosas», dijo el jurista, y agregó que «está más que probado la privación ilegal de libertad por parte del cantante y además también se encontraron estupefacientes en el allanamiento, la droga está diseminada por toda la casa».
