Controlar la calidad y el estado de los alimentos es igual de fundamental que comer sano y variado. Y, en ese sentido, es imprescindible procurar lavar de forma correcta las frutas y verduras antes de comerlos para eliminar bacterias y evitar complicaciones de salud. A continuación, compartimos el método perfecto para lograrlo de forma fácil y rápida.
A la hora de preparar tus alimentos, especialmente frutas y verduras, la higiene juega un papel fundamental en la prevención de enfermedades, sobre todo si estos no serán hervidos, ya que muchas veces pueden contener pesticidas o bacterias que producen enfermedades tales como Escherichia coli, la Salmonela o la Listeria.
Por eso, es clave seguir estos consejos cotidianamente para ahorrarse cualquier dolor de cabeza, y también para prolongar la conservación de estos alimentos.
Cómo limpiar las frutas y verduras para eliminar las bacterias
Antes de llevar a cabo este procedimiento, procurar que la bacha de la cocina donde se lavarán las frutas y verduras esté limpia y libre de residuos, tanto alimenticios como de cualquier tipo.
Materiales:
- Agua
- Jabón
Procedimiento:
- Lavarse las manos: Antes de manipular cualquier alimento, es imprescindible lavarse bien las manos con jabón. Este paso es crucial para evitar la transferencia de gérmenes a la comida, principalmente si se fue al baño anteriormente o se tuvo contacto con mascotas.
- Enjuagar con agua corriente: Utilizar agua corriente para enjuagar todas tus frutas y verduras. El agua es el elemento clave para eliminar los restos de pesticidas y bacterias dañinas como la Escherichia coli, la Salmonela o la Listeria.
- Evitar el uso de productos químicos: No es necesario utilizar jabones, detergentes, alcohol, lavandina u otros productos desinfectantes para lavar tus alimentos. Estos productos pueden dejar residuos que son perjudiciales para la salud.
- Cepillar los alimentos duros: Para alimentos duros como papas o manzanas, se puede utilizar un cepillo limpio para frotar suavemente y eliminar la suciedad adherida. Sin embargo, este paso no es necesario para todas las frutas y verduras.
- Secado adecuado: Una vez enjuagados, secar los vegetales y frutas sobre una superficie limpia utilizando un paño o papel de cocina. Es importante evitar dejar los alimentos húmedos, ya que esto puede promover el crecimiento de bacterias.