Una especie desconocida de perezoso prehistórico habitó hace millones de años la Pampa Húmeda Argentina, de acuerdo al hallazgo de un cráneo fosilizado en la localidad bonaerense de San Pedro, que había sido ubicado hace ocho años en una tosca a 18 metros de profundidad.
«Si bien en sus vistas frontal, posterior y lateral, el fósil conserva semejanza con los Milodontes; su gran tamaño, la presencia de un quinto diente y la suma de las numerosas diferencias morfológicas demuestran que se trata de un animal totalmente novedoso y desconocido por la ciencia», aseguró José Luis Aguilar director del Museo Paleontológico de San pedro
Los investigadores encontraron este cráneo de 65 centímetros «lo que permite inferir que el animal tenía unos cuatro metros de longitud», precisó Aguilar.
El cráneo estuvo depositado en el Museo hasta que el Laboratorio de Paleontología Molecular de la Universidad Nacional de Rosario a cargo de Luciano Brambilla ratificó que se trataba de una especie desconocida de perezoso al compararlo con otras especies y fosiles de otros museos.
«Al principio pensamos que podía corresponder a un ejemplar de Mylodon o de Glossotherium, dos géneros conocidos de perezosos extintos que habitaron la Región Pampeana ya que, por su aspecto general, era a los que más se asemejaba el fósil encontrado. Sin embargo, pronto surgieron diferencias que llamaron la atención», destacó el director del Museo.
Aguilar detalló: «Comparado con los dos grandes perezosos mencionados, el animal hallado en San Pedro presenta una prominencia robusta y marcada delimitando la región superior y anterior de la órbita del ojo, lo que seguramente aporta un detalle particular al rostro de este animal».
Además, la talla «está lejos el rango normal de los dos géneros» por lo que se cree que «estamos ante una nueva especie. Un animal único proveniente de sedimentos depositados hace unos 800.000 años, durante una edad denominada “Ensenadense”.
Numerosos investigadores apoyan la idea de que en ese lapso ciertos mamíferos, debido a condiciones climáticas y de alimentación favorables, desarrollaron un marcado gigantismo con respecto a aquellos que vivieron durante el resto del Cuaternario pampeano, «lo que se condice con el animal hallado en San Pedro» destacó Aguilar.
Las investigaciones dan cuenta de que «sería un animal con un cráneo poderoso, de unos 70 centímetros de longitud, alargado y algo bajo, con amplias fosas nasales, y un ceño abundante con un relieve prominente», puntualizó.
El nombre de la nueva especie animal emergida de la edad Ensenadense, será consensuado entre la Universidad de Rosario, y el Grupo Conservacionista de Fósiles, equipo del Museo de San Pedro.
La primera parte del nombre «seguramente hará referencia a la antigüedad del fósil descubierto con respecto a sus parientes más cercanos, ya que el fósil posee una edad bastante mayor a los fósiles más próximos estudiados de ese grupo de mamíferos», indicó el director del Museo.
La segunda parte, por expreso pedido del Museo “Fray Manuel de Torres”, tendrá que ver con destacar la procedencia geográfica del lugar donde fue descubierta la nueva especie, y rendir homenaje a la ciudad de San Pedro ya que, en los últimos 20 años, esta zona ha aportado numerosos hallazgos a la paleontología argentina.
Esta nueva especie fue encontrada en una cantera de extracción de tosca ubicada a unos 4 kilómetros al sureste del casco urbano de San Pedro, a unos 18 metros de profundidad.
El punto exacto donde se recuperó el cráneo del perezoso gigante ya no existe debido a que, luego de su hallazgo en 2009, se prosiguió con el trabajo de extracción de tosca hasta agotar el predio.
«Este caso representa un notable ejemplo de los resultados que se pueden generar, en paleontología, a partir de la interacción entre las empresas mineras, los Museos locales y los investigadores», aseguró Aguilar.
Y agregó: «Si bien en sus vistas frontal, posterior y lateral, el fósil conserva semejanza con los Milodontes; su gran tamaño, la presencia de un quinto diente y la suma de las numerosas diferencias morfológicas identificadas, demuestran que se trata de un animal totalmente novedoso y desconocido por la ciencia».