La investigación por la muerte del profesor de inglés Edward Vaz Fascioli continua en Maldonado, Uuruguay. La ex pareja del hombre, Lulukhy «Lulú» Morales, fue detenida como única sospechosa de encargar el crimen a un sicario.
Antes de quedar detenida, Morales reveló quiénes son los actuales dueños de la casa «Gypsy Queen», ubicada en el barrio Beverly Hills de Punta del Este: un empresario brasileño llamado Ronosalto Pereira Neves y su mujer, la ex Miss Brasil Nayla Micherif.
Pereira Neves tiene vínculo comercial con el actual presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, tal como lo aseguró Lulukh al sitio El País de Uruguay. El matrimonio pagó US$ 1.250.000 por la casa en 2013.
Después de la compra, Lulukhy y su amiga Leticia quedaron al frente de la agenda «sólo para adultos» de la casa, incluidas las fiestas swingers.
«Él (por Vaz) nos vivía pidiendo plata. Nos prostituía tanto a mí como a mi amiga. Yo lo conocí cuando era mi profesor de inglés, desde los 14 años vivo con él», reveló Lulukhy.
La mujer, que es de ascendencia romani y de ahí el nombre de su casa, «Reina gitana», expuso el infierno que vivía con su ex pareja. «Nos amenazó muchísimas veces tanto a mí como a mi amiga. Mi actual pareja fue la que nos salvó», aseguró.
«Tanto yo como mi amiga nos prostituimos obligadas. Después de nueve años intenté divorciarme pero nunca pude. Él era un tipo muy chiquito pero con ideas nazis y estaba armado. Era proxeneta», reveló la morocha.
El extraño mea culpa de Lulukhy llegó poco antes de su detención.
«Con mi amiga fuimos las que hacíamos las fiestas swinger en Punta del Este. Hacíamos las fiestas mandadas por él, que dirigía todo pero no estaba presente. Él manejaba toda la plata», disparó.