Más de 3.500 personas realizaron el curso de buenas prácticas de manipulación de alimentos durante la primera gestión del intendente, Pablo Petrecca. Así lo informó el titular de la dirección de Bromatología y Zoonosis del Gobierno de Junín, Julio Ferrero, quien agregó que los cursos continuarán durante el año próximo, aunque cambiarán las temáticas y la duración de los mismos. Además, ya no habrá libreta sanitaria, que será reemplazada por un carnet habilitante de manipulación de alimentos y que tendrá una vigencia de tres años.
Por otro lado, se dejará sin efecto el segundo sellado que se realizaba en cabina sanitaria, ya que era una solicitud por parte de los comerciantes y desde el Municipio se los escuchó y dio una respuesta.
Al respecto, Ferrero manifestó: «Hoy realizamos la última charla sobre capacitación en el manejo de alimentos y tuvimos un muy buen número de participantes. En estos cuatro años, hemos superado las 3500 personas capacitadas y estamos muy contentos por estos resultados, pero vamos a seguir trabajando para llegar a más personas. Sabemos de la importancia de estos cursos para que los vecinos de Junín puedan comer tranquilos, ya que las mercaderías que consumen están controladas».
«Al principio teníamos que llamar o presionar para que vengan, pero con el correr de los meses, la gente comenzó a preguntar cuándo se hacían y por eso llegamos a un buen número de personas», agregó.
«Nosotros trabajamos para hacerle fácil la vida al vecino. Y también vamos a comentar que la libreta sanitaria dejará de existir para darle paso a un carnet. Esto sucederá a partir del año próximo, ya que recibimos una notificación por parte de la Unidad Coordinación de Alimentos (UCAL). Tendremos un año para reacomodar el sistema y que entre en vigencia plena. Esta será la única documentación que se le va a pedir a la persona que manipule alimentos. Además, desaparecen los cursos de 14 horas o de dos días, y quedará un curso de un solo día con una duración de 7 horas. Si este curso se aprueba, se dará una habilitación de tres años para poder trabajar sin inconvenientes», adelantó el funcionario.
Sobre los sellados, el responsable del área de Bromatología, Dr. Hernán Ceci, explicó: «Desde que se creó la Cabina Sanitaria en el año 1985, teníamos un mecanismo de re sellado en la cual los distribuidores que recibían materia prima o mercadería que luego iba a llegar a los negocios más pequeños, tenían que volver a pasar por la cabina sanitaria a resellar su boleta. Pero para facilitarle a los pequeños comerciantes su tarea, decidimos sacar este re-sellado que estaba en la ordenanza. Esto sucederá a partir del enero del año próximo y creemos que es algo importante para el comerciante».
«Este también era un reclamo que los comerciantes nos hacían cuando realizábamos las inspecciones. Nos encontrábamos con el inconveniente de que, ya sea por tiempo o por cuestiones económicas, no podían hacerlo. O, a veces, se quedaban sin productos en el medio de un evento, iban a buscar su materia prima y no podían cumplimentar con su pasaje por cabina. Y eso era un motivo de secuestro al momento de inspeccionar. El objetivo es facilitarle la tarea, pero también pedirles responsabilidad a los comerciantes ya que estamos hablando de alimentos».
Voces de los vecinos que recibieron el curso
Raúl Ferrari, uno de los vecinos que asistió al curso, indicó: «Me parece una muy buena medida del Municipio que hagamos estos cursos. Es importante para que tengamos conciencia de cómo debemos manejarnos. Algo del curso sabía por los años que llevo en este rubro, pero siempre aprendemos algo nuevo».
Sebastián González, en tanto, dijo: «Los cursos son muy buenos y me han enseñado cosas que no sabía. Hace poco que comencé en el rubro y en la parte de alimentos y manipulación es muy bueno todo lo que nos enseñaron».
Por su parte, Carlos Rojas comentó: «Me parece muy interesante este curso de manipulación de alimentos y, si bien hay cosas que sabíamos, hay otras que se escapan por desconocimiento. Hay que tomar todas las precauciones del caso y este curso sirve para trabajar de manera más minuciosa para el cuidado del alimento. Esto es una tranquilidad tanto para nosotros como para la gente que compra».
Finalmente, Falvio Magallanes expresó: «El curso es dinámico e interesante. Además, está muy bueno porque se incorporan conocimientos ya que muchas veces nos manejamos con la cultura del ‘se hace así porque siempre se hizo’. A veces siempre decimos que el fuego mata todo y no es así. En estos cursos se muestran otras cosas y se explica cómo se deben manipular los alimentos».
«La idea es que los puedan hacer de manera responsable y conciente para que puedan estar tranquilos de llevar a los consumidores un producto en condiciones y que no le va a hacer mal a nadie», finalizó Ceci.
