Por qué hay que hervir hojas frescas de laurel y para qué sirve este simple ritual

Hoy, su poder sigue vigente en prácticas esotéricas que buscan equilibrar los espacios y atraer vibraciones positivas.

El poder espiritual del laurel

Además de sus usos medicinales y culinarios, el laurel es conocido en el mundo esotérico por su capacidad para:

• Purificar ambientes

• Alejar malas energías

• Atraer prosperidad y buena suerte

• Proteger el hogar y sus habitantes

Por eso, hervir hojas frescas de laurel se ha transformado en un ritual simple, pero cargado de significado espiritual, ideal para renovar la energía de tu casa durante el fin de semana.

Ritual con laurel: paso a paso

Materiales:

• Un ramo de hojas de laurel frescas

• Un recipiente resistente al calor

• Agua

• Un espacio tranquilo y ventilado

Instrucciones:

1. Preparar el ambiente: limpiá y ordená el lugar donde vas a realizar el ritual. Abrí las ventanas para que la energía fluya libremente.

2. Hervir el laurel: colocá las hojas en el recipiente con agua y llevá a ebullición. Luego, bajá el fuego y dejá hervir a fuego lento por cinco minutos.

3. Purificar tu hogar: con el recipiente en mano, recorré cada habitación para que el vapor y el aroma del laurel se dispersen por todos los rincones.

4. Visualización y afirmaciones: mientras caminás, imaginá cómo la energía negativa se disipa y es reemplazada por una energía luminosa. Repetí frases como:

   • “Atraigo la abundancia y la prosperidad”

   • “Mi hogar es un espacio seguro y lleno de amor”

   • “Renuevo mi energía y mi espíritu”

5. Cierre del ritual: colocá el recipiente en un lugar visible, podés adornarlo con velas blancas o piedras naturales para potenciar su efecto.

Beneficios del ritual del laurel

• Purificación energética: ayuda a limpiar ambientes cargados o tensos.

• Protección espiritual: se cree que repele malas influencias.

• Revitalización mental y física: su aroma estimula los sentidos.

• Conexión con la naturaleza: promueve un momento de introspección y armonía.

Este ritual puede repetirse regularmente, en especial los fines de semana, para mantener una energía positiva y renovada en el hogar.