Como parte de la renovación de su oferta de equipos en el Congreso Mundial de Móviles que termina hoy en esta ciudad, Sony presentó el Xperia Touch: un proyector que transforma cualquier superficie (una pared, una mesa) en una pantalla táctil.
Lo hace proyectando la imagen de la interfaz de Android 7 (y de las aplicaciones que puede correr), detectando la posición de las manos del o los usuarios y calculando qué están haciendo gracias a unos sensores infrarrojos y una cámara que analiza los movimientos. Funciona en tiempo real y es muy rápido: tanto como para permitir el uso de un juego.
Puede proyectar su imagen hasta en 23 pulgadas (con la función interactiva) o hasta 82 pulgadas (sólo como proyector); sirve también para ver películas o hacer presentaciones, siempre que el proyector se pueda poner contra la pared. Además tiene parlantes estéreo, conectividad Bluetooth (además de Wi-Fi para acceder a Internet), USB, entrada HDMI, 32 GB de almacenamiento interno, y un peso de 1 kg, que incluye la batería que le permite tener una hora de autonomía (también puede usarse enchufado a la pared). Incluso tiene una cámara para hacer videollamadas.
Tendrá un precio cercano a los 1500 euros cuando salga a la venta en el segundo trimestre del año.