El hecho ocurrió en un hospital de Fortaleza. El recién nacido tenía una cola de 12 centímetros de largo que salía de su nalga izquierda.
El recién nacido presentaba una deformación de 12 centímetros de largo que salía de su nalga izquierda y culminaba con una bola de grasa de 4 centímetros de ancho.
El nacimiento ocurrió en el Hospital de Niños Albert Sabin en Fortaleza y el caso se conoció a través de la revista Journal of Pediatric Surgery Case Reports.
Luego de comprobar que la cola no afectaba al sistema nervioso del bebé, se decidió extirparla en una operación rápida. Cuando ya estuvo desconectada del cuerpo del recién nacido, se comprobó que la cola era tejido deshuesado mientras que la bola estaba formada por grasa tejido conectivo embrionario.
Desde que hay registros, se han notificado 40 casos como éste. Se trata de una deformación de la que se tienen poco datos y todavía “no se comprende completamente”.
Esperan que el caso de este bebé con una extensa cola pueda servir a la comunidad científica para estudiar este tipo de anomalías, que son “anomalías congénitas raras y describen protuberancias ubicadas alrededor de la línea media de la región lumbosacra cubierta por piel, que representan un rastro embrionario”.
En esa línea, los médicos recalcan en que este tipo de casos se deben “investigar mediante exámenes físicos y radiológicos de manera integral”. Por eso, es fundamental que se investigue “a presencia de disrafismo espinal oculto en pacientes con sospecha de lesiones cutáneas”.