La historia es tan surrealista como verídica. James Haggerty, vecino de Oldham y aficionado del Manchester United, inició una demanda contra una pizzería que le entregó una pizza en la que se podía apreciar la cara de Pep Guardiola, técnico del Manchester City.
“Era jueves por la noche y mi mujer había salido a jugar al bingo, así que pedí una pizza”, sentencia Haggerty en declaraciones al ‘Sunday Sport’. “Cuando abrí la caja me sentí físicamente enfermo. Allí, mirándome, estaba el sangriento Pep Guardiola. Su cara estaba allí, en el queso fundido”, añadió.
Ante esa situación, Haggerty decidió llamar a la pizzería para pedir que le volvieran a enviar otra pizza gratis y que se llevaran la que tenía la cara de Guardiola, algo que el establecimiento se negó a hacer y que ha provocado que el seguidor de los ‘diablos rojos’ haya acudido a su abogado para interponer una demanda, cifrada en 5.000 libras esterlinas.
“Me dijeron que estaba viendo cosas, pero yo no estoy enfermo. Sabía perfectamente lo que tenía delante de mí. No puedo volver a pedir una pizza. Cada vez que cierro los ojos veo a ese bastardo azul y su cara de queso”, concluyó Haggerty, dejando claro que su odio hacia al Manchester City se extiende más allá de los terrenos de juego.
