Una ONG lanzó una campaña llamada «Cena sin pantallas» para recuperar el diálogo y la comunicación cara a cara tras recopilar pedidos de niños y adolescentes por el uso abusivo del celular por parte de sus padres durante las comidas o en los momentos de encuentros familiares.
Esta ONG presentará la campaña durante la tercera edición de la Semana de la Ciudadanía y la Alfabetización Digital, que se iniciará el 6 de noviembre en el Centro Cultural de la Ciencia, y contará con el apoyo de Save the Children, el Centro Cultural de la Ciencia y el Ministerio de Educación de la Nación.
Padres hiperconectados y desatentos
Czarny puntualizó que los niños y adolescentes aseguran que su progenitores «están viciados de tecnología, más el padre que la madre» y detalló que «nadie registra que los adultos también están hiperconectados, entonces si los padres se quejan por sus hijos y los hijos por sus padres, ahí hay una problemática de diálogo».
En este sentido explicó que la campaña, que tuvo su primera edición en 2016, apunta a pensar «espacios sin dispositivos tecnológicos, pensarnos como sujetos humanos a partir del uso inteligente y medido de la tecnología en los momentos y lugares adecuados».
Czarny dio como ejemplo lo vivenciado en un taller con un niño de 7 años que veía a su madre sentada en la punta de sillón enviando mensajes en lugar de dialogar. «En ese momento él tomo su celular y le envió un mensaje vía la red social Snapchat a su madre, a través de los dibujos que promueve esa red, para advertirle sobre el uso abusivo del dispositivo en el momento en que necesitaba comunicarle algo».
Que la familia no quede esclava de la tecnología
«No pretendemos salir a cuestionar el uso de la tecnología, sino evitar que esa misma tecnología termine decidiendo por uno. Cuando un adolescente o un padre están viciados de tecnología, hay como una ruptura del contrato familiar», señaló la especialista sobre la campaña.
Y ejemplificó: «Uno puede decidir cuando tomar o cuando fumar, pese a que es una conducta adictiva, es la persona la que decide hacerlo. Con la tecnología se convierte en una adicción tal que termina decidiendo por nosotros».
Entre las propuestas que propone «Cena sin pantallas» está dejar los celulares en el centro de la mesa al momento de la comida y al primero que no aguanta tomarlo y usarlo que le toque lavar los platos o acumular una cantidad equis de vales para usar el celular».
La profesional remarcó, además, que la escuela «si bien debe armar un proceso para incorporar tecnología en las aulas, también debe promover una reflexión de cómo usarla y transmitir valores. Aunque la incorporación de la tecnología es muy importante en el proceso educativo, agranda las brechas digitales entre aquellos chicos que saben usarla mejor frente a los otros, por lo que si no se promueven valores puede ser un arma de doble filo».
La titular de Chicos.net comparó la iniciativa para el uso responsable de las tecnología con la campaña para dejar de fumar y agregó que «no está bueno usar el celular a toda hora y en cualquier momento y lugar».
Precisó, además, que «hay que repensar por dónde pasa la comunicación. Las redes sociales no son malas, pero tienen sus riesgos. Hay que saber minimizar esos riesgos para usarlas y configurar las herramientas necesarias para evitar los acosos como en el ciberbullying».
Czamy apuntó que hay que difundir un tema que está en la agenda social, estar informados sobre los peligros ocultos en la Internet para los chicos, el uso consciente de la tecnología, la responsabilidad de los padres y la familia, el alcance de la tecnología en el aula, dejar de lado los celulares en reuniones familiares y con amigos y volver a valorar el diálogo».