Este martes se realizó una olla popular en el barrio Progreso organizado por la integrantes de la cooperativa «Las Marías». Los integrantes de la cooperativa indicaron que «a más de un mes de la aplicación del aislamiento social preventivo y obligatorio, los trabajadores y trabajadoras recicladores de la cooperativa “Las Marías” siguen sin poder salir a cumplir su labor diaria que les garantiza los ingresos para alimentar a sus familias. Como medida urgente, decidieron organizarse y comenzaron este lunes con la “Olla Popular Cartonera” que es el almuerzo para más de 200 personas».
«La cuarentena -agregaron- se encarga de visibilizar situaciones que ya venían sucediendo en la trama social, la compleja realidad de los sectores más postergados que dependen del trabajo día a día para sobrevivir no es una novedad. En el caso de los cooperativistas cartoneros de la ciudad, nucleados en el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), este momento es una emergencia».
Además indicaron que «esta olla la organizamos para darle de comer a nuestras familias con alimentos que fuimos consiguiendo a través de la solidaridad de la gente y algunos sindicatos. La hacemos porque no podemos trabajar, queremos que la olla se termine lo antes posible para poder laburar como nosotros sabemos y veníamos haciéndolo”, explica Matías, trabajador cartonero activo»
«Sin poder ingresar al relleno sanitario por los riesgos que eso conlleva y aunque le presentaron la iniciativa de un proyecto de reciclado adaptable a la situación excepcional al municipio, las y los recicladores insisten en la necesidad de respuestas», expresaron.
«No estamos siendo reconocidos como trabajadores aunque nuestra actividad es una de las exceptuadas en los decretos porque aportamos la materia prima del envasado de la industria alimenticia, de la higiene y los medicamentos”, cuenta Jaqueline, cooperativista de «Las Marías». Y agrega: “nosotros no nos podemos quedar quietos, si no tenemos para comer nuestras familias tienen hambre y con hambre no podemos hacer la cuarentena, por eso hacemos la olla”.
«Desde la cooperativa de las y los trabajadores cartoneros confían en que puede ser un buen momento para que la gente tome conciencia de la separación de la basura en sus casas y la importancia del reciclado en la ciudad y en el cuidado del medio ambiente. Pero la falta de insumos sanitarios y garantías para trabajar los pone en una situación excluyente», indicaron los cooperativistas y además analizó Matías, otro miembro de la cooperativa que “ofrecemos un servicio importante para la comunidad de Junín y aún así no somos escuchados ni tenidos en cuenta” .
«La solidaridad y el reconocimiento al trabajo de los recicladores por parte de algunos allegados y organizaciones sindicales es lo que sustenta la olla popular y aún así no está garantizado su funcionamiento por el período incierto que durará la cuarentena», se indicó desde «Las Marías».
“Agradecemos a todos los que se solidarizan y necesitamos su ayuda. Sabemos que los que nos pasa también les pasa a otras familias. Venimos hablando otras organizaciones y a todos nos pasa lo mismo”, cuenta Jaqueline.
“Nosotros nos autogestionamos este trabajo y ahora lo hacemos con algo tan básico como es un plato de comida todos los días. Seguiremos en esa línea, nuestro esfuerzo y la solidaridad de la gente es lo que nos fortalece para seguir, pero necesitamos que se nos reconozca el derecho a trabajar en condiciones dignas para la comunidad. Realmente necesitamos respuestas”, concluyó Jaqueline mientras organizaba con sus compañeros la búsqueda de los alimentos para el almuerzo de mañana.
