La cadena de supermercados Carrefour presentó un procedimiento preventivo de crisis (PPCE) ante el Ministerio de Trabajo de la Nación, mecanismo previsto en la Ley de Contrato de Trabajo que debe tramitarse de manera previa a la comunicación de despidos o suspensiones de personal.
La empresa aseguró, a través de un comunicado de prensa, que «está atravesando una situación económica compleja tras tres años de pérdidas» y que «la apertura de este diálogo, junto al Sindicato de Empleados de Comercio y el Gobierno, le permitirá plantear un plan para reimpulsar su crecimiento».
En base a lo que estipulan las normas, el procedimiento preventivo de crisis deberá tramitarse con carácter previo a la comunicación de despidos o suspensiones por razones de fuerza mayor, causas económicas o tecnológicas.
El PPCE está previsto para los casos en los que el empleador planee afectar a más del 15% de los trabajadores en empresas de menos de 400 empleados; a más del 10% en empresas de entre 400 y 1.000 trabajadores; y a más del 5% del personal en compañías de más de 1.000 trabajadores.
En base a datos del mercado, Carrefour cuenta en la actualidad con un total de 500 sucursales en la Argentina y alrededor de 20 mil empleados.
Si bien las versiones de despidos y cierres en Carrefour comenzaron a correr con fuerza en las últimas semanas, la posibilidad de que la cadena presente de manera inmediata el procedimiento preventivo de crisis sorprendió al sector.